El Blog de Emilio Matei

martes, 15 de julio de 2014

Quiénes pueden ganar los mundiales

En cierto sentido, esta Copa Mundial parece anticipar la muerte de los grandes talentos individuales. O al menos los que pueden desequilibrar, como suelen decir los comentaristas futboleros. Y esto no sólo le haría mal al fútbol sino que, quiero creer con una buena dosis de optimismo, empeoraría el negocio.

La decisión de la FIFA de que los árbitros sean permisivos respecto a los actos de violencia antideportiva con la excusa absurda de agilizar el juego, modifica el panorama. Llegar a la final implica ahora tener buenos repuestos para sustituir a los jugadores lesionados. En realidad, después de haber visto muchos partidos uno se queda con la sensación de que hubo suerte, la suerte de que ningún jugador haya quedado lisiado para siempre. O al menos eso parece ya que una vértebra rota es como mínimo un aviso escalofriante.
Los jugadores más sacrificados y los más talentosos son los mejores candidatos para una lesión que los deje fuera del mundial o, peor, fuera de la posibilidad de practicar este deporte, por lo que habrá que tener sustitutos adecuados. Y ya se sabe que el talento es único y particular de modo que los jugadores que lo tienen nunca son reemplazables por otros iguales.
di Maria
(Lesionado)
Khedira
(Lesionado)

Neymar
(Lesionado)
 Otro resultado insidioso es la manera en que los árbitros decidieron sacar o no una tarjeta amarilla, teniendo en cuenta que la roja casi no existió en la actualidad de este mundial. Cuando por alguna decisión impredecible el árbitro saca por fin la tarjeta amarilla, siempre lo hace luego de una cantidad de veces que decidió no hacerlo. Esto crea una sensación de injusticia por un lado y una tentación para los jugadores de ir más allá de lo que normalmente se hubieran permitido en el ejercicio de alguna violencia. Otra razón más que puede dejar afuera por repetición de tarjetas a cualquier jugador, inclusive el más prolijo, si se siente demasiado atacado por otro e impune.


 Varios de los mejores jugadores de esta época quedaron fuera de los últimos partidos de sus respectivas selecciones como Neymar, di Maria o Khedira. O, como en el caso de Messi, optaron por una cierta apatía que les quita expresión a su talento. Y no creo que en esto haya habido cobardía, me gusta pensar que en la cara apagada de Messi lo que hay es una gran tristeza por la ausencia de una diversión que la violencia admitida hace desaparecer. Messi no es un gladiador, en su sencillez es un artista.

En qué se convertirá el fútbol en el futuro es imposible predecir. Lo que sé es que por este camino no puede llegarse a ningún buen lugar.


Hace varios años, discutiendo con un profesor de gimnasia respecto a las reglas de un juego, me dijo que en un reglamento uno ponía lo que razonablemente podía suceder, que ningún reglamento contempla la entrada de un león a la cancha. En un futuro próximo tal vez y si el negocio lo precisa, esa cláusula deberá considerarse.

1 comentario:

  1. Que buena idea la delos leones!!! Había un deporte en el que los usaban, no me acuerdo en que campeonato mundial o si era en los play off de la NBA, pero algunos de los jugadores usaban unas pilchas muy mononas, con unos arreglos re punk y otros, seguro que para señalar el contraste, eran unos zaparrastrosos Igual al final todos festejaban comiéndose un león! O los que festejaban eran los leones? En fin hay tantos programas en el cable que se me mezclan los torneos y las competencias...
    Edu (de la barra brava de "En realidá hoy, ayer y siempre"

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