La islas Camores, el Himalaya, Chichén Itzá, los fiordos de
Chile, y los de Noruega, Rapa Nui, Nigeria, el Kalahari y la cuenca de Olduvai,
el Gran Arrecife de Coral. Canguros y Chimpancés en libertad.
Desde que nací hasta ahora vi aparecer en mi vida objetos maravillosos. Radios que
se podían llevar en el bolsillo, televisores enormes y en color que permiten
ver un mundial de fútbol en tiempo real, aviones que vuelan a más de diez mil
metros de altura y que suelen tener más estabilidad que un barco, teléfonos
portátiles que permiten compartir sonidos e imágenes a través del océano,
computadoras que hasta me permiten desde mi casa y en ropa interior, ganar el dinero necesario para vivir y
tantas otras cosas maravillosas que de una u otra manera tengo o que puedo
usar. A veces escucho a gente que se pregunta qué se va a perder cuando muera,
qué maravillas tecnológicas habrá que ni siquiera podemos imaginar. Y esa gente
tiene razón, quién podría negarlo. Yo mismo me lo pregunto, a veces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario